Más de cien personas se vieron afectadas por la emisión de este gas registrada el lunes pasado en Quintero-Puchuncaví, en esta nota te explicamos qué es el dióxido de azufre.

El lunes pasado (6 de junio) se dictó una nueva Emergencia Ambiental en las comunas de Quintero, Puchuncaví y Concón, en la región de Valparaíso, debido a un peak de dióxido de azufre (SO2) en el aire.

Según lo informado por las autoridades, se registró una concentración de 1.327 microgramos por metro cúbico de aire. Lo que supera hasta cuatro veces la concentración máxima de SO2 admitida por la ley.

Si bien los niveles de gases se normalizaron durante el día, más de un centenar de personas asistieron a los centros de salud por síntomas de intoxicación, entre ellos se encontraban 50 estudiantes, según informó La Tercera.

Mareos, náuseas y fuertes dolores de cabeza fueron los síntomas que los vecinos del sector presentaron.

Te recomendamos leer: Qué pasó en Quintero y Puchuncaví

Fue en este contexto que la Fiscalía local de Quintero abrió una investigación con tal de aclarar los síntomas presentados por los vecinos, ya que se presentaron tres denuncias de intoxicación masiva en niños y adultos.

Aunque mucho se habla del dióxido de azufre encontrado en las localidades antes mencionadas ¿sabemos realmente qué es y cuáles son las consecuencias para la salud de las personas? A continuación te lo explicamos.

¿Qué es el dióxido de azufre?

De acuerdo al Instituto para la Salud Geoambiental, organización sin fines de lucro en España, es un gas incoloro, irritante y de fuerte olor, el cual es generado por la quema de combustibles que contienen azufre – como el carbón, leña, petróleo, fundición de concentrados de cobre – en las centrales eléctricas.

Este gas también se puede encontrar en fuentes naturales, como los gases producidos por los volcanes, lo cuales son altamente tóxicos.

Además, cuando entra en contacto con el agua puede generar ácido sulfúrico, compuesto químico altamente corrosivo y dañino. De hecho, el SO2 es uno de los compuestos que generar la lluvia ácida.

Consecuencias para la salud

Según el instituto, el dióxido de azufre en el aire puede generar los siguientes síntomas en las personas:

• Dificultad para respirar
• Inflamación de las vías respiratorias
• Irritación ocular por formación de ácido sulfuroso sobre las mucosas húmedas
• Alteraciones psíquicas
• Edema pulmonar
• Paro cardíaco
• Colapso circulatorio
• Queratitis

Igualmente, el actual Seremi de Medio Ambiente de la región de Valparaíso, Hernán Ramírez, en una columna de opinión publicada el 2019, también hizo referencia a las consecuencias para la salud pública.

«Las exposiciones prolongadas al SO₂ (mayores a 24 horas) disminuyen rápidamente la función pulmonar, agravan enfermedades respiratorias preexistentes y reducen la habilidad de los pulmones para liberar partículas extrañas».

¿Qué dice la normativa ambiental sobre el dióxido de azufre?

En mayo del 2019, tras una de las primeras crisis ambientales registradas en Quintero y Puchuncaví causadas por los gases tóxicos – emanados de Codelco y Aes Gener – se publicó la Norma Primaria de Calidad del Aire de Dióxido de Azufre (SO₂).

La normativa busca proteger la salud de las personas que viven en las Zonas de Sacrificio, quienes se ven constantemente afectados por gases tóxicos como el SO2. Esta, «establece un límite horario equivalente a la normativa vigente en la Unión Europea (UE), y viene a reemplazar la normativa chilena que data desde el año 2002».

Los límites son los siguientes:

Aunque la normativa mejoró los nulos límites de años anteriores, de acuerdo a la columna de Hernán Ramírez, estos no son suficientes para resguardar la salud pública, ni tampoco se asemejan a la norma de la Unión Europea.

La norma de la UE contempla un Plan de Cumplimiento de la Norma, tras la ocurrencia de 24 excedencias – correspondientes a 350 microgramos por metro cúbico – por año. Sin embargo, la actual noma chilena no incluye este plan.

«Particularmente el Plan de Descontaminación de Quintero-Puchuncaví permite que se supere 131 veces la norma en un año durante tres años seguidos, siendo necesarias 399 excedencias consecutivas antes de que la zona sea declarada saturada y se inicie proceso de dictación de un plan de cumplimiento de norma», escribió el actual Seremi de Medio Ambiente.