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Por qué los endulzantes no ayudan a bajar de peso

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Según las especialistas, los endulzantes o edulcorantes por sí solos no ayudan a bajar de peso, pues se requieren de hábitos saludables.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo que los edulcorantes no son efectivos para controlar el peso, además de que pueden tener efectos indeseados para la salud si se usan por mucho tiempo. En esta nota te explicamos por qué los endulzantes no ayudan a bajar de peso. 

La institución desanconsejó el uso de edulcorantes ya que no son efectivos para controlar el peso a largo plazo y pueden aumentar el riesgo de diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares y la mortalidad. 

“Reemplazar los azúcares libres por edulcorantes no ofrece ningún beneficio a largo plazo para reducir grasas en el cuerpo en adultos o niños”, dijo el director de nutrición y seguridad de los alimentos de la entidad, Francesco Branca.

¿Por qué los endulzantes no ayudan a bajar de peso?

La Organización de Consumidores y Usuarios en Chile observó que el 69% de la población declara usar endulzantes en su dieta diaria. Sin embargo, la obesidad sigue creciendo. 

Especialistas entrevistadas aseguran que dejar de consumir azúcar y reemplazarla con endulzante no soluciona el problema.

Hay varios los factores que inciden en que las personas suban de peso:

  1. Falta de hábitos saludables

    Uno de los factores es la falta de hábitos saludables.“Para bajar de peso no basta con cambiar el azúcar por el endulzante, hay que cambiar el estilo de vida”, explica Nelba Villagrán, nutricionista integrativa y ex presidenta del colegio de Nutricionistas.

    Para controlar el peso las personas deben llevar una alimentación equilibrada y nutritiva, realizar actividad física de forma regular, dormir bien y consumir suficiente fibra.

  2. Tipo de alimentación y cantidad de porciones

    Las personas con el endulzante tienen la sensación de estar comiendo menos o más saludable, y por eso se dan más libertades o comen peor.

    De esta manera aumentan las cantidades de las porciones y consumen alimentos muy procesados y con alto nivel de grasas inflamatorias.

    El aumento de las porciones en grandes cantidades principalmente de productos procesados y que algunos de ellos contienen edulcorantes artificiales, además de calorías, grasas saturadas y trans, sodio, etc., que podrían ser una causa de la acumulación de grasa excesiva desencadenante de obesidad“, asegura Yasna Muñoz, nutricionista e investigadora del Centro de Investigación Biomédica de la Universidad Diego Portales.

  3. Alimentos light ultra procesados

    Muchos de los alimentos light endulzados con edulcorantes son ultraprocesados y tienen alto contenido de grasas.

    De esta manera, una opción light puede terminar teniendo las mismas cantidad de calorías o más lo que no ayuda a controlar el peso.

  4. Sabor dulce en exceso

    Los edulcorantes son más dulces que la azúcar y hacen que uno comience a depender del sabor dulce en exceso para sentir placer. 

    Según Villagrán, el cerebro va reconocer el sabor dulce y va tratar de procesarlo como si fuera energía, pero esta energía no llega porque los endulzantes no son metabolizables.

    El organismo entonces cae en lo que se llama resistencia en la insulina, en que deja de recibir a la insulina en su membrana celular porque ha sido engañado por los endulzantes“, explica Villagrán.

  5. Afecta la microbiota

    Los endulzantes son destructores de la microbiota. Las microbiotas son bacterias que habitan en nuestro organismo y que nos protegen de enfermedades y agentes patógenos. Además ayudan a la metabolización de los alimentos ingeridos. 

    Al alterar estas bacterias se eleva el riesgo de enfermedades no transmisibles como la diabetes tipo 2 o enfermedades cardiovasculares.

    Además al destruirlas, “impide que el colon tenga una población adecuada que ayude a regular y a bajar de peso”, comenta Villagrán.