Explicativo
2 de enero de 2020Pablo Fernández de Chequeado: “No hay una bala de plata que resuelve todo” el problema de la desinformación
Pablo Fernández lleva varios años chequeando información en Argentina. Hoy, como director de Innovación Editorial de Chequeado, fact checking transandino, hace un balance del trabajo que realizan en el país vecino y analiza cómo se ha difundido desinformación durante la campaña presidencial de Argentina.
-¿Cómo crees que se le puede ganar a la desinformación?
-Lo que decimos siempre nosotros es que podemos de alguna manera desacelerar, reducir la desinformación. No creemos o no conocemos casos en que haya un país sin desinformación. Sí creemos en esta batalla incremental, pero no es que haya una bala de plata que resuelve todo. Lo que sí creemos es qué hay un montón de herramientas que podemos usar para reducirla y de Chequeado vamos por todas, las que se nos van ocurriendo, las que vemos que funcionan en otros países y podemos adaptar.
-¿Cómo ha sido la recepción de los lectores de Chequeado? ¿Hay harta colaboración de la gente?
-Sí. Chequeado nace el 2010 y tiene un eje muy fuerte en redes sociales . El 2010 ya estaba Twitter y Facebook y Chequeado le dio mucho espacio a las redes y ahí surgían pedidos de chequeos. Ahora también tenemos otros canales, desde WhatsApp hasta un formulario que tenemos en el sitio.
–Hace poco hubo campaña hubo campaña presidencial en Argentina. ¿Crees que las noticias falsas pueden amenazar elecciones o sistemas democráticos?
-Lo que trata de hacer Chequeado es tratar de pensar que no todos los países son iguales, y en ese sentido lo que sí todos suponemos, pero es muy difícil de probar esto, es que la desinformación tiene un peso en las elecciones, seguro, qué peso tiene me es muy difícil de medir. Sí creemos que puede influir, de ahí a definir la elección no lo sabemos, no hay pruebas contundentes de eso, sí hay pruebas de que los partidos políticos o militantes de ciertos partidos generan desinformación y uno tiende a creer que lo hacen porque tiene algún tipo de impacto.
–¿Durante la campaña presidencial pudieron comprobar algún aumento en la cantidad de desinformación?
-Reverso, que es un proyecto que impulsamos desde Chequeado con AFP empezó en junio tenía más herramientas de monitoreo de las que teníamos nosotros antes. Lo que notamos es que después que se definió la elección bajó un poco el caudal no solo de lo que encontramos sino de lo que nos mandaban.
–En Chile se han podido ver por un lado cuentas anónimas, pero también figuras públicas que han difundido noticias falsas. ¿En Argentina han podido ver que las autoridades tiendan a manipular la información a su favor o derechamente desinformar?
-Nosotros no trabajamos con intencionalidad, el valor de lo que hacemos es hacerlo rápido y preciso. Dicho eso, sí, de todos los partidos políticos han publicado cosas erróneas, y nobleza obliga, en algunos casos la borraron, en otros casos pidieron perdón y en otros casos no hicieron nada. Lo que sí sabemos es que los políticos en Argentina le prestan atención a lo que hace Chequeado, incluso cuando no están de acuerdo con algo nos cuestionan públicamente, nos responden.