El histórico conflicto entre China y Taiwán ha tomado intensidad en los últimos meses. Tras la invasión rusa en territorio ucraniano algunos han retomado la idea de que el gran país asiático tome medidas bélicas para recuperar la isla.

Además, con Joe Biden declarando marcadamente la defensa a Taiwán, con Tsai Ing-wen como mandataria de Taiwán a favor de la independencia y una China reprimiendo los esfuerzos independentistas de Hong Kong, el panorama solo empeora la evolución de las relaciones de ambos territorios en las últimas décadas.

Sin embargo, el posicionamiento de Estados Unidos como aliado en la isla y las fuertes relaciones comerciales entre China y Taiwán son un cerco para un peligro bélico.

Pero, primero entendamos el problema.

¿Por qué hay conflicto entre China y Taiwán?

Taiwán fue anexada al imperio chino en el siglo XVII, después de estar habitada principalmente por tribus aborígenes. Fue territorio del grande asiático hasta que la perdió contra Japón en la guerra Sino-Japonesa a fines del Siglo XX.

Sin embargo, vino la guerra civil que enfrentó a los comunistas liderados por Mao Zedong y los nacionalistas representados por Chiang Kai-shek. Tras la victoria de Mao, la parte continental del país pasó a llamarse República Popular de China con capital en Pekin, mientras que Kai-shek junto a sus principales aliados y su cuerpo militar escaparon a Taiwán, declarando ahí la República China, con capital en Taipei.

Ambas «naciones» lucharon por consagrarse como la «verdadera» China en ojos internacionales. De hecho, con Estados Unidos como principal aliado, Taiwán ocupó un asiento en la Organización de las Naciones Unidas hasta 1971. Desde entonces la Pekin ocupa ese lugar, y amenaza a quienes reconozcan a la isla como independiente.

Desde entonces que Estads Unidos mantiene una política de «ambigüedad estratégica». Esto significa reconocer a la República Popular China como la legítima, pero al mismo tiempo está comprometido a defender a Taipei si recibe un ataque continental. Gracias a esto, mantiene relaciones comerciales con ambos países.

En la década de los 90 hubo intentos de acercamientos cuando Pekin acuñó el término «Una China», que respeta la legitimidad y los procesos individuales de Taiwán, pero reconociéndolo como parte de China (sin opciones de independencia). Entonces Taiwán rechazó la oferta, pero el concepto quedó en las relaciones internacionales.

¿Qué tan cerca estamos de un conflicto armado?

La cercanía de China con Rusia y la invasión a Ucrania por parte de Vladimir Putin han prendido las alarmas por un posible conflicto entre el Pekin y Taipei, que temen que Xi Jinping vea en Putin un ejemplo.

Sin embargo, la escalada del conflicto lleva tiempo. Biden ha sido un presidente que ha remarcado constantemente el compromiso de defensa de EEUU con Taiwán. Xi Jinping incluso le señaló al mandatario norteamericano que de apoyar la independencia de Taipei estaría jugando «con fuego» y «se quemaría».

Además, la reelección de Tsai Ing-wen como mandataria de Taiwán es una clara señal de las intenciones de la isla por independizarse, puesto es una de las políticas que más la representa.

Por su parte, China ha comenzado a sobrevolar aviones de guerra en la zona de defensa aérea taiwanesa, como advertencia.

No obstante, a pesar del ascenso del conflicto en términos políticos, los expertos señalan que la guerra no es- al menos- inminente.

La estrecha relación comercial, cultural y política que lograron Pekin con Taipei en los años más venideros son una muralla del conflicto bélico. Las empresas taiwanesas han invertido cerca de US $60 millones en China, por lo que una invasión afectaría al país continental.

Además, la aferrea defensa norteamericana y la inversión militar en Taiwán podría trear un caro precio para la potencia mundial si tratase de invadir.

Hasta ahora, a ninguno de los dos países le conviene hacer movimientos muy arriesgados. Por ahora, la comunidad internacional está pendiente de este conflicto, que podría traer consecuencias económicas devastadoras, ya que China es la mayor industria del mundo y Taiwán tiene una producción tecnológica importante para el globo.