El 18 de noviembre la FIFA anunció que ya no se venderán bebidas alcohólicas en los estadios del mundial debido a un acuerdo con el país anfitrión. Acá te explicamos por qué está prohibido el consumo de alcohol en Qatar.

El domingo 20 de noviembre inició oficialmente el Mundial de Fútbol 2022, en la ciudad de Jor, Qatar. Aunque el evento deportivo ha sido foco de diversas críticas, entre ellas algunas relacionadas a los Derechos Humanos, este no cesó su actividad. Es más, miles de hinchas provenientes de todas partes del mundo llegaron hasta el país asiático para apoyar a sus equipos y celebrar sus respectivos triunfos.

Sin embargo, algo muy característico ha faltado para complementar cada celebración y/o lamento: el consumo de alcohol. Aunque esta práctica no es bien vista, es una acción que está asociada culturalmente a los partidos de fútbol.

¿Por qué está prohibido el consumo de alcohol en Qatar?

Dos días antes de comenzar el Mundial, la FIFA anunció que no se venderán bebidas alcohólicas en ninguno de los ocho estadios dispuestos para la Copa del Mundo. Esto se debe a las conversaciones entre los directivos y el país anfitrión.

Esto se contradice con la medida inicial dada por el organismo, donde se confirmó que los asistentes tendrían la opción de consumir cerveza en los lugares seleccionados dentro de cada recinto.

Con la nueva ordenanza solo se podrá beber cerveza sin alcohol en los estadios y en los puntos denominados Fan Fest, pero con limitaciones.

El cese de la venta de cervezas en los estadios de Qatar es una disposición que se condice con la cultura y religión que guía la vida de la sociedad qatarí.

Ubicado al oeste de Asia, el Estado de Qatar es uno más de los países árabes de la región. La mayoría de su población profesa la fe islámica. Dentro su cultura rige la Sharía o ley islámica, la cual está basada en las enseñanzas del Corán. Es en este libro donde se expresa el repudio a las bebidas alcohólicas.

Es así que la Sharía, en el caso de Qatar, solo acepta la venta de bebidas alcohólicas en algunos hoteles y restaurantes del país. Así como limita su compra para aquellas personas que cuenten con un permiso especial.