De acuerdo a la información entregada por la Canciller chilena, Antonia Urrejola, son al menos 316 personas expatriadas de Nicaragua.
Todos los expulsados por el gobierno de Daniel Ortega fueron tildados de “traidores a la patria”. A continuación explicamos por qué fueron expatriados los nicaragüenses.
A comienzos de febrero fueron expulsadas más 200 personas de Nicaragua. Se trata de activistas, periodistas, políticos, entre otros, que están en contra del régimen de Daniel Ortega.
Unas semanas después el mismo tribunal expatrió a 94 personas más, a quienes se les quitó la nacionalidad y sus bienes inmuebles, además de inhabilitarlos para ejercer cargos públicos y de elección popular.
A raíz de estos hechos, varios países alrededor del mundo – entre ellos Chile – condenaron la decisión y ofrecieron asilo a los expulsados.
¿Por qué fueron expatriados los nicaragüenses?
Todo comenzó el 8 de febrero cuando el Tribunal de Apelaciones de Managua deportó a 222 nicaragüenses. En el comunicado de prensa publicado, argumentaron que dichas personas fueron condenadas por:
- Cometer actos que menoscaban la independencia, la soberanía y la autodeterminación del pueblo.
- Incitar a la violencia, al terrorismo y a la desestabilización económica.
- Lesionar los intereses supremos de la nación al alterar la paz, seguridad y el ordenamiento constitucional.
De esta manera fueron declarados traidores a la patria y, por consiguiente, se les quitaron – de forma perpetua – sus derechos ciudadanos.
Una semana después sucedió algo similar con otros casi 100 nicaragüenses. El 15 de febrero, el tribunal calificó de “traidores a la patria” a 94 personas más.
Al igual que a los deportados a comienzos de mes, a estos opositores al gobierno se les quitó todo derecho ciudadano, su nacionalidad y todos sus bienes inmuebles. Además, fueron declarados prófugos de la justicia.
Es preciso destacar que las personas afectadas son opositores al gobierno de Daniel Ortega, por lo tanto, son considerados expulsados políticos.
Reacciones ante las expulsiones
Tras conocerse la masiva deportación y las sanciones determinadas para los opositores al régimen de Ortega, fueron varios países los que reaccionaron en contra.
Uno de ellos fue Estados Unidos, país que a comienzos del mes recibió a más de 200 nicaragüenses expatriados. Chile, por su parte, también condenó la decisión de Nicaragua.
“Ante la reciente decisión del Estado de Nicaragua de privar de su nacionalidad y derechos políticos a más de trescientas personas nicaragüenses, identificadas como opositoras políticas, el Gobierno de Chile arbitrará los medios legales necesarios para ofrecerles la debida protección internacional”, informó el Gobierno a través de un comunicado.
De esta forma, Chile se sumó a los países que darán alojamiento a las personas expulsadas de Nicaragua.