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1 de enero de 2024Qué son las empresas fantasmas que se usaron en la Operación Tributos
Este tipo de sociedades se utilizan, en algunos casos, para obtener beneficios tributarios.
Por John AldayLas empresas fantasmas fueron una de las principales figuras utilizadas en la Operación Tributos, el mayor fraude al Fisco registrado en la historia de nuestro país.
Recordemos que siete clanes operaron durante varios años para obtener, de forma ilegal y con IVA falsos, millonarias devoluciones de impuestos y rebajas a sus cargas tributarias.
Gran parte de las empresas que participaron en estos negocios, eran «fantasmas», también conocidas como sociedades interpuestas o de papel. Además, también habían compañías reales, que usaban los servicios de las empresas fantasmas para obtener beneficios tributarios.
De esta forma, los supuestos empresarios consiguieron generar un perjuicio al Fisco por más de $240 mil millones.
¿Qué son las empresas fantasmas que se usaron en al Operación Tributos?
Las empresas fantasmas son figuras que se utilizan para generar o simulares operaciones económicas, pero que no cuentan con activos ni con ejecuciones empresariales reales. Es decir, no tienen una actividad verdadera, empleados ni un lugar físico, sino que es solo una empresa inscrita en el papel.
Este tipo de sociedades no son ilegales en sí, ya que se pueden utilizar para algunas operaciones regulares. Por ejemplo, cuando una compañía quiere vender un mismo producto, pero con una versión más cara y otra más barata, utiliza una sociedad de papel para generar una marca no relacionada a la inicial, y así no vincular el producto principal con su símil de menor precio.
No obstante, también funcionan muchas veces como mecanismos para eludir impuestos. Esto porque permiten simular algunas operaciones no reales (sin generar costos para el empresario) y así obtener algunos de los beneficios tributarios que contempla la ley.
Esto mismo es lo que pasó con la Operación Tributos, donde se usaron estas empresas para crear facturas falsas de actividades ficticias. Para esto contactaron a otras personas que «prestaron» sus datos personales (testaferros) para crear estas compañías, que utilizaban los clanes para generar perjuicios al Fisco.