La Unidad Especializada en Crimen Organizado de la Fiscalía Nacional identificó cinco hitos clave que marcaron la llegada del crimen organizado trasnacional al país. En esta nota, cómo llegó el crimen organizado trasnacional a Chile y cómo han transformado por completo el panorama delictivo.

¿Cómo llegó el crimen organizado trasnacional a Chile?

El crimen organizado, sobre todo con la llegada de organizaciones extranjeras como el Tren de Aragua, ha cambiado radicalmente la forma en que se perciben y ejecutan los ilícitos en Chile.

Desde el aumento de homicidios entre bandas rivales hasta los secuestros extorsivos y el cobro de vacunas en zonas fronterizas, la presencia de estas bandas ha traído nuevas formas de violencia y delitos, según explica Ignacio Castillo, director de la Unidad Especializada en Crimen Organizado de la Fiscalía Nacional. Antes de su arribo, este tipo de crímenes no era común en el país.

“Hay un cambio sobre todo cualitativo en las formas en que se presenta la criminalidad organizada trasnacional en relación con la nacional”, explicó Castillo.

Por su parte, el fiscal regional metropolitano sur y coordinador de los equipos ECOH, Héctor Barros, coincide en que hay una gran diferencia entre la criminalidad organizada nacional versus la criminalidad trasnacional. Esta última es mucho más dinámica, ya que no existe el arraigo territorial. 

«No podemos conocer sus redes, porque muchos de ellos están en condición irregular, por lo tanto, no tenemos ni siquiera su identidad. Incluso los líderes de estas organizaciones muchas veces no están en el país, sino que están en otros países desde donde dan las instrucciones”, puntualiza. 

Los hitos más importantes:

La llegada de Larry Changa

Uno de los momentos clave en el ingreso del crimen organizado trasnacional fue la llegada de Larry Amaury Álvarez Núñez, alias “Larry Changa”, a Chile en 2018.

Este cofundador del Tren de Aragua, junto a otros líderes de la organización, estableció operaciones en el país, siendo capturado en Colombia en 2023.

La Fiscalía chilena continúa buscando su extradición por diversos delitos cometidos en regiones como Iquique y Valparaíso.

El asesinato del cabo Palma

Uno de los episodios más impactantes ocurrió el 5 de abril de 2023, cuando el cabo Daniel Palma fue asesinado mientras realizaba labores de fiscalización en Santiago.

Las investigaciones revelaron que los autores del crimen eran miembros del Tren de Aragua, lo que generó una conmoción a nivel nacional.

Los Gallegos en Arica

En junio de 2022, la Fiscalía desarticuló a uno de los brazos operativos más violentos del Tren de Aragua, conocido como Los Gallegos.

Este grupo operaba en Arica y fue responsable de múltiples delitos, incluyendo homicidios y tráfico de drogas. Su centro de operaciones, descubierto en Cerro Chuño, albergaba restos de víctimas, evidenciando el nivel de brutalidad de la organización.

Detenciones clave en el Tren de Aragua

La Fiscalía ha llevado a cabo importantes detenciones de líderes del Tren de Aragua en Chile, entre ellos Carlos González Vaca, alias “Estrella”, y Hernan Landaeta Garlotti, alias “Satanás”.

Estas capturas son parte de investigaciones que buscan desarticular las estructuras delictivas que operan en todo el país, involucradas en delitos como tráfico de migrantes y secuestros.

Quíntuples homicidios en Batuco y Lampa

Entre abril de 2023 y julio de 2024, Chile presenció dos masacres en Batuco y Lampa, ambas vinculadas al Tren de Aragua. En ambos casos, cinco personas fueron asesinadas durante eventos que, en un principio, parecían ser celebraciones sociales, pero resultaron ser encuentros marcados por la violencia de estas bandas.

El crimen del ex teniente Ronald Ojeda

Un caso que resaltó por su crueldad fue el secuestro y asesinato del ex teniente Ronald Ojeda, un crimen que, según las investigaciones, estaría motivado por razones políticas y vinculado al Tren de Aragua.

La violencia que no se detiene

El crimen organizado en Chile ya no se limita solo al narcotráfico, sino que ha evolucionado hacia secuestros, extorsiones y homicidios a gran escala. Con líderes de estas organizaciones operando desde fuera del país, las autoridades enfrentan el desafío de desmantelar redes que se mueven con rapidez y operan en distintos frentes.