Más de 20 mil niños y adolescentes ingresaron a Chile por pasos no habilitados entre 2020 y 2023
El ingreso no regular de los niños, niñas y adolescentes migrantes puede afectar negativamente en sus necesidades más básicas al llegar al país.
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) publicó esta semana el Informe de necesidades de la niñez y adolescencia migrante en las regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá y Antofagasta. En esta se revela que 21.540 niños, niñas y adolescentes (NNA) ingresaron a Chile por pasos no habilitados entre 2020 y 2023.
Los datos que entregó Carabineros a UNICEF señalan que en 2020 1.983 NNA ingresaron al país por caminos no regulares. Al siguiente año este número aumentó a 6.114, y en 2023 alcanzó los 8.020. El año pasado la cifra disminuyó hasta los 5.423.
El informe señala que hay limitaciones en el acceso a información sobre NNA migrantes, porque gran parte de los instrumentos de medición no están diseñados para representar a esta población.
“Asimismo, hay una parte importante de personas menores de 18 años migrantes, cuyos cuidadores y/o cuidadoras se encuentran con su situación migratoria irregular, lo que las aleja más de las instituciones e instrumentos públicos de registro”, menciona el documento. Por lo tanto, el número de NNA que ingresó por pasos no habilitados en los últimos años puede ser incluso mayor.
Las necesidades de los NNA migrantes en Chile
Como menciona su nombre, el informe se concentra en revelar las principales necesidades de los niños migrantes en las regiones más cercanas a la frontera norte del país.
Uno de los temas que se menciona es que los hogares de migrantes presentan bajos ingresos económicos, dificultando a los niños y adolescentes el acceso a bienes y servicios esenciales, como alimentación y vivienda.
El documento señala que como muchos de sus cuidadores ingresan irregularmente al país, se limitan el acceso a los empleos formales, por lo tanto terminan con condiciones laborales precarias.
El acceso al agua y el saneamiento es otra de las necesidades de los NNA migrantes, principalmente en los campamentos y los asentamientos irregulares donde residen.
Por otra parte, se menciona “la existencia de NNA migrantes que se han visto separados de sus
familiares (aún habiendo llegado a Chile con ellos); que se encuentran no acompañados (principalmente en la frontera); o bien, que pasan gran parte del día solos, debido principalmente a la jornada laboral de sus cuidadores y cuidadoras”.
Esto genera que los niños, niñas y adolescentes se encuentren expuestos a situaciones de violencia, y de consumo y tráfico de drogas.
El informe de UNICEF también lista entre estas necesidades la falta de atención especializada para salud mental y física, la poca de integración escolar para los NNA migrantes, además de condiciones de hacinamiento en sus hogares.