Política
28 de octubre de 2020Segundo retiro del 10%: cómo nació el proyecto y el impacto que puede provocar
Por Augusto Valenzuela y Josefa Riady
Este martes la Comisión de Constitución de la Cámara de Diputados aprobó la idea de legislar un segundo retiro del 10% de los fondos previsionales. Un proyecto impulsado por la diputada humanista Pamela Jiles que contempla un retiro mínimo de 35 UF (cerca de un millón de pesos) y un máximo de 150 UF (cerca de 4 millones de pesos) y que se pagaría en una sola cuota después de 30 días hábiles de la solicitud.
Cómo partió el proyecto
El pasado 25 de agosto la diputada Jiles presentó un proyecto para permitir un segundo retiro del 10% de las AFP, cuya normativa era semejante al primer rescate que se había aprobado un mes antes.
El pasado 15 de octubre el proyecto fue refundido en el Congreso con otras dos iniciativas que apuntaban en la misma línea, es decir, permitir el retiro excepcional de fondos acumulados en compañías de seguros, bajo la modalidad de rentas vitalicias y permitir al Juez de Familia autorizar el retiro de fondos de pensiones de un alimentante moroso, por parte del alimentario o su representante legal en calidad de agente oficioso.
Este martes todos los proyectos que habían sido refundidos fueron aprobados para su legislación en la Comisión de Constitución de la Cámara de Diputados, con 11 votos a favor y 1 en contra, incluyendo a parlamentarios del oficialismo.
La respuesta del Gobierno
Desde el Gobierno anunciaron que se presentó una reserva de constitucionalidad al proyecto del segundo retiro del 10%, con lo cual se acudirá al Tribunal Constitucional. “Entendemos que este proyecto tiene un quórum de tres quintos como lo han calificado, pero nosotros consideramos que es de dos tercios. Por lo mismo vamos a hacer una reserva de constitucionalidad en esa materia”, dijo el ministro de la Segpres, Cristián Monckeberg, a Radio Bio Bio tras la aprobación.
¿Qué falta para que se convierta en ley?
Paso 1: Esta serie de proyectos relacionados al segundo retiro del 10% debe ingresar a la Cámara de Diputados para su aprobación.
Paso 2: Si es aprobado allí, pasaría al Senado donde se podrían hacer cambios al proyecto.
Paso 3: Si esos cambios fueran hechos, se genera un tercer trámite legislativo, donde los parlamentarios de la Cámara deben aceptar las modificaciones hechas en el Senado para que se convierta en ley.
En caso contrario se pasa a una eventual Comisión Mixta.
Paso 4: En una eventual Comisión Mixta un grupo de diputados y senadores deberá acordar una fórmula a fin de llegar a un consenso, que luego deberá votarse en ambas cámaras. Si la votación resultara positiva, el proyecto sería promulgado.
Paso 5: En caso de que el proyecto quede listo para convertirse en ley, se puede presentar un requerimiento de inconstitucionalidad o bien, el gobierno puede ejercer su derecho a veto. Con esto, se puede forzar al Congreso a discutir nuevos cambios al texto o eliminar alguno de los puntos de este.
Opinión de los expertos
Para Hermann González, coordinador macroeconómico de Clapes UC, este segundo retiro de las AFP no debería tener un impacto muy negativo. “Lo que se esperaba en el primer retiro era que cayeran los mercados, el tipo de cambio y la Bolsa, pero principalmente el Banco Central y la Comisión para el Mercado Financiero actuaron de forma coordinada para evitarlo”, dice. Según el economista, el mercado no debería verse tan afectado si ambos entes efectuaran una buena regulación ante un eventual segundo retiro del 10%.
Sin embargo, González advierte que “si el Gobierno no repone los ahorros, las pensiones por definición caerán”. Ante esto, aclara que la reposición es bastante cara.
Pablo Barberis, director del Área de Consultoría de Unegocios FEN de la Universidad de Chile, también confía en la buena respuesta del mercado. “Los mercados deberían reaccionar de una forma normal, estable, sin mayores desviaciones”, dice.
Respecto al impacto en las pensiones, también dice que se verían reducidas. No obstante, aclara que el segundo retiro del 10% daría mayor dinamismo a la economía, además de una disminución del actual decrecimiento, debido al mayor gasto en el consumo interno si los montos fueran retirados.