Giorgio Jackson es, probablemente, una de las autoridades que más resulto afectado por la polémica de la fundación Democracia Viva, que inició el Caso Convenios. Como fundador y uno de los principales rostros de Revolución Democrática, se le vinculó directamente a este caso de corrupción, que tuvo como primeros protagonistas a militantes de este partido.
Fue entonces cuando, en un contexto de fuerte presión política desde la oposición, frente a este reciente caso de corrupción dentro del Gobierno, cuando se preparó una acusación constitucional en su contra, que podía contar con apoyo suficiente para lograr su destitución.
En este contexto, y frente a la presión política, Jackson renunció y dejó el gabinete, después de acompañar a Gabriel Boric en su proyecto político durante más de una década.
Hasta el momento, se encuentra imputado en la causa que se abrió por la querella de dos parlamentarios republicanos, que investigan los contratos de ProCultura y Democracia Viva, del Caso Convenios. Este jueves tendrá que declarar, al igual que Miguel Crispi y Javiera Martínez, frente al fiscal regional de Antofagasta Christian Aguilar.
Se investiga su posible intervención en el decreto del Consejo de Auditoría Interna General que redujo el control presupuestario de las entidades públicas, al no obligarlas a informar de las transferencias a terceros.
Aunque, de momento, aún no se le determinan responsabilidades en este caso. De hecho, los únicos dos imputados con medidas cautelares (prisión preventiva) por el caso Democracia Viva son Carlos Contreras y Daniel Andrade. Aunque hay otros 14 en todo el Caso Convenios.
Quién es Giorgio Jackson
Nacido en febrero de 1987, tiene 35 años y es hijo de Kenneth Jackson y de Carmen Gloria Drago. Hizo su enseñanza básica y media en el Colegio Alemán Santo Tomás Moro en la comuna de Providencia. En el curso de su enseñanza media fue voluntario en Un Techo para Chile (TECHO en la actualidad).
Durante su juventud fue seleccionado nacional de Voleibol en las categorías Menores 2004 y Juveniles 2006. En 2004 ingresó a estudiar Ingeniería Civil Industrial en la Pontificia Universidad Católica.
Carrera política
Durante su estadía en la Universidad Católica se unió en 2008 al movimiento Nueva Acción Universitaria (NAU). Posteriormente se convertiría en el presidente de la Federación de Estudiantes de esta casa de estudios (FEUC), posición que ocupó entre 2010 y 2011.
En esa época asumió como vocero de la CONFECh junto a Camila Vallejo, presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECh). Ambos fueron protagonistas de las movilizaciones estudiantiles del 2011, donde Jackson fue de los más críticos hacia el gobierno de Sebastián Piñera.
En medio de estas movilizaciones evitó referirse a una posible carrera política. No obstante, a comienzos de 2012, Jackson anunció el lanzamiento del movimiento político Revolución Democrática (RD), partido en el cual milita hasta hoy.
En diciembre del mismo año, proclamó su candidatura independiente a la Cámara de Diputados en las elecciones parlamentarias de 2013.
En el transcurso de su campaña se le asoció en reiteradas ocasiones a la candidatura presidencial de Michelle Bachelet, acercamiento que Jackson rechazó completamente. El 17 de noviembre de 2013 fue electo como diputado en el distrito 22 (Santiago), elección en la que también resultaron elegidos otros tres dirigentes estudiantiles: Camila Vallejo, Karol Cariola y Gabriel Boric.
Primeros años en el Congreso
Jugó un rol importante en la fundación del Frente Amplio durante su primer periodo en el Congreso, siendo uno de los líderes que impulsó la candidatura presidencial de Beatriz Sánchez en 2017.
Giorgio Jackson junto a Beatriz Sánchez y Gabriel Boric en 2017.
Ese mismo año Jackson lanzó su candidatura para la reelección en el Congreso, esta vez por el nuevo distrito 10. Nuevamente salió elegido, en esta ocasión como el diputado con más votos en las elecciones parlamentarias de 2017.
A mediados de 2020 fue denunciado a través de Twitter por el diputado y ex militante de RD, Renato Garín, de donar la mitad de su sueldo al partido.