El ex alcalde suplente de Atacama, Mario Morales, quien lideró la administración durante tres años, está en la lupa de la Fiscalía por un grave caso de corrupción política, que se conoce como ‘Operación Pureza’.

Resulta que aparentemente el edil, junto a funcionarios municipales, recibía coimas de parte de empresarios, a cambio de entregar, irregularmente, millonarias licitaciones públicas, por trabajos de reparos o mantención en la comuna.

De hecho, la Fiscalía acusa que Morales usó la ‘coima’ para lograr liderar la administración. A raiz de la destitución del exalcalde, este prometió a cuatro concejales beneficios a cambio de que lo eligieran edil. Así llegó a liderar durante tres años esta comuna de la Región de Atacama, hasta que fue puesto en prisión preventiva por este caso.

Además, este miércoles la PDI lo detuvo por unadenuncia de amenazas en medio del juicio oral por la Operación Pureza. La acusación menciona que Morales interceptó en dos ocasiones a una de las imputadas en el caso, señalándole que ‘su vida dependía’ de lo que afirmara en su declaración.

Quién es Mario Morales, el exalcalde de Tierra Amarilla acusado de corrupción y amenazas

En el año 2016 Mario Morales se convirtió en concejal de Tierra Amarilla, con un sueldo de $730 mil pesos, en representación del Partido Socialista. Este puesto existe, entre otras cosas, para que se pueda fiscalizar directamente las acciones del edil, y evitar así irregularidades.

En 2017 se inhabilitó a Osvaldo Delgado, hasta entonces alcalde de Tierra Amarilla, por una acusación de injurias graves. Delgado estaba empezando su segundo periodo consecutivo, y lo dejaron sin la posiblidad de ejercer por 700 días.

Entonces, Morales tuvo una idea (ilegal) que le permitió ascender rápidamente. Ofreció coimas a cuatro de los seis concejales que votarían por quien sería el próximo alcalde. A cambio, podrían obtener, junto con él, algunos beneficios de forma irregular.

Ese mismo año Morales empezó con su administración. Poco a poco, convenció a funcionarios municipales y a un grupo de empresarios que hicieran con él un ‘sistema’, donde cobraban a los privados un 10% de las ganancias de licitaciones, a cambio de entregárselas irregularmente.

Se estima que en esta comuna, con una población de menos de 13 mil personas, los ahora imputados por fraude obtuvieron más de $300 millones de las arcas fiscales. A 100 días de que empezó su administración, agradeció en la prensa a la gente que lo acompañó en este proceso:

«quiero agradecer a mi familia que entiende mi obligación con mi comuna y que recibo el apoyo incondicional de parte de ellos, a los funcionarios municipales que con buen trato hacia ellos, responden con buen trabajo y ganas de sacar adelante esta comuna, a los Concejales que me han apoyado para distribuir de mejor manera los recursos hacia quienes lo requieren«.

La caída de Morales

Sin embargo, poco duró este tiempo feliz para Morales. En 2019 tuvo una primera señal de su caída. En una reunión del Partido Socialista, lo acusaron de agresión, amenazas y discriminación contra unos militantes por su condición sexual, que terminó con su detención. Solo meses más tardes, también recibió una denuncia de una abogada de la municipalidad, por acoso y maltrato laboral (1).

No obstante, esto fue solo la antesala del proceso judicial que terminaría con la carrera política de Mario Morales. En 2020, ya en su último año como alcalde, el Consejo de Defensa del Estado presentó una querella contra Morales y otros funcionarios por fraude, cohecho y soborno. Esto provocó la detención del exedil, quien fue puesto en prisión preventiva. Además, se suspendió su militancia en el PS.

Entonces arribó Cristobal Zuñiga a la municipalidad (también elegido por el Concejo Municipal) del Partido Comunista. Morales acusó en 2021 a este edil de participar también en irregularidades durante su administración, afirmando que solicitó puestos municipales para militantes de su partido (2). Mismo año que Morales logró revertir la prisión preventiva y quedó con arresto domiciliario.

Ahora, después de dos años del avance de la investigación, comenzó este lunes el juicio oral en contra del edil y sus compañeros, donde, aparentemente, amenazó a uno de muerte. En total, se solicitan más de 40 años de prisión para el edil por cohecho pasivo, fraude al Fisco, asociación ilícita, negociación incompatible y obstrucción a la investigación.